Fintech e Inversión: ¿Qué opciones existen?
En el emocionante mundo de las Fintech, el financiamiento o fundraising juega un papel fundamental en el éxito y crecimiento de una empresa en sus etapas iniciales. De hecho, asegurar capital externo puede marcar la diferencia entre una idea prometedora y su transformación en una empresa próspera. En este artículo, exploraremos los diferentes tipos de financiamiento disponibles y cómo pueden beneficiar tanto a las Fintech como a cualquier startup en su búsqueda de inversión.
Explorando las Opciones y Tendencias de Financiamiento
En primer lugar, analicemos las diferentes opciones a las que las Fintech y las startups tienen acceso. Es importante destacar que existe una diferencia entre las opciones disponibles y los instrumentos que cada una de ellas ofrece para establecer un acuerdo de financiamiento.
Estas son algunas de las opciones a las que las Fintech / Startups pueden acceder:
Venture Capital: El capital de riesgo es un tipo de financiamiento proporcionado por firmas de inversión especializadas en startups en etapas tempranas. Estas firmas invierten grandes sumas de dinero a cambio de una participación accionaria en la empresa. Además del financiamiento, el capital de riesgo también aporta experiencia y una valiosa red de contactos.
Angel Investing: Los inversionistas ángeles son individuos con un capital considerable que invierten su propio dinero en empresas que consideran prometedoras. Buscan oportunidades en etapas muy tempranas y proporcionan financiamiento inicial, asesoramiento y una red de contactos valiosa.
Crowdfunding: El crowdfunding ha ganado popularidad en los últimos años como una forma de obtener financiamiento. Permite a las startups recaudar fondos a través de contribuciones de numerosas personas a través de plataformas en línea. Existen diferentes modelos de crowdfunding.
Incubadoras y aceleradoras: Estas organizaciones brindan un apoyo integral a startups que cumplen con ciertos requisitos. Además del financiamiento, ofrecen mentores, espacios de trabajo compartidos y programas de capacitación. A cambio de estos beneficios, generalmente adquieren una participación accionaria en las empresas que respaldan, aunque no siempre es el caso.
Bootstrapping: Se refiere al autofinanciamiento empresarial y entendamos este como el proceso de iniciar y hacer crecer un negocio utilizando recursos limitados, solo con lo que cuentan y prescindiendo de financiamiento externo significativo. Las startups que utilizan esta estrategia buscan formas creativas de financiar y desarrollar su negocio aprovechando sus propios recursos y generando ingresos gradualmente. Aunque este enfoque es mucho más lento para escalar el negocio y alcanzar una valoración considerable, proporciona independencia de inversores y préstamos.
En Latinoamérica (Latam), existen algunas particularidades y opciones adicionales:
Financiamiento gubernamental: Algunos países latinoamericanos ofrecen programas de financiamiento gubernamental para impulsar la innovación y el emprendimiento. Estos programas proporcionan capital y apoyo a las startups en etapas tempranas. Algunos ejemplos incluyen la iniciativa 500 Startups en México, Startup Chile en Chile, Innpulsa Colombia; y Startup Perú e Innóvate Perú.
Inversionistas corporativos: En ocasiones algunas compañías latinoamericanas buscan incursionar en el financiamiento de startups invirtiendo en aquellas que complementen sus líneas de negocio existentes.
Familia y amigos: Aunque pueda parecer ajeno al entorno empresarial, en algunas startups se recurre al financiamiento de familiares y amigos, quienes actúan como inversores iniciales.
Después de acceder a cualquiera de las opciones anteriores ¿Cuál es la tendencia que hay en los acuerdos de financiamiento?
Hablemos un poco sobre contratos. Los acuerdos de financiamiento no se limitan solo a acuerdos verbales, sino que requieren de acuerdos que respalden las inversiones realizadas o que se pretenden realizar.
Porque cuando un inversor, ya sea una persona natural o jurídica, desea financiar a una startup, ya sea en Estados Unidos, Europa, Latinoamérica, Asia o África, busca salvaguardar su inversión y proteger sus intereses, considerando los riesgos potenciales. Esto es absolutamente lógico.
¿CÓMO SE PROTEGEN ESTOS INTERESES?
A través de acuerdos que detallan los términos y condiciones bajo los cuales los inversores otorgan los fondos, asesoramiento, mentoría, conexiones, entre otros, a la startup. Estos acuerdos pueden variar según la naturaleza de la inversión.
Aquí presento algunas tendencias comunes en los acuerdos de inversión:
Acuerdo de inversión / Investment Agreement: Es un acuerdo legalmente vinculante firmado entre los fundadores de la startup y los potenciales inversores interesados en adquirir una participación accionaria en el negocio. Este acuerdo define los derechos y obligaciones de los inversores, así como las restricciones sobre el ejercicio de sus poderes, administración, operatividad.
Acuerdo de accionistas / Shareholder Agreement: Es un contrato firmado entre los titulares de acciones de una startup. Estos acuerdos abordan asuntos como la propiedad, la responsabilidad, la toma de decisiones, los procedimientos operativos, la participación accionaria, la dirección de la empresa, el reparto de utilidades, entre otros aspectos. En algunas legislaciones de Latam, es importante tener cuidado para no infringir los derechos de los accionistas minoritarios.
SAFE (Simple Agreement for Future Equity): Es un acuerdo de inversión entre una Startup/Fintech y un inversor en el cual la empresa promete otorgar al inversor una participación accionaria en el futuro, sujeta a eventos específicos como una futura financiación de capital o adquisición de la empresa. Este documento que contiene algunos términos estructurales del negocio y debe tener una redacción bien clara permite a los inversores proporcionar fondos a una startup sin recibir acciones inmediatamente, lo que ayuda a captar capital y reduce ciertos costos a corto plazo. Sin embargo, es esencial leer detenidamente los términos y obtener asesoramiento adecuado antes de firmar.
Notas Convertibles / Convertible Notes: Las Notas Convertibles son instrumentos financieros utilizados para recaudar capital. En términos simples, se pueden considerar como una deuda establecida entre la startup y el inversor. Al llegar a la fecha de vencimiento, el inversor tiene la opción de exigir el reembolso en efectivo o convertir la deuda en acciones de la empresa. Este enfoque es común en las etapas iniciales de financiamiento, como parte del capital semilla o pre-seed.
Existen otros acuerdos, como el acuerdo de compra de acciones, contrato de opciones sobre acciones, acuerdo de acciones restringidas, acuerdo con acciones preferentes, contratos sobre regalías (royalties), comisiones sobre ingresos o compensación diferida (deferred compensation).
Esta entrada pretende, por ahora, volar a unos 20 mil pies de altura. Busca empezar a abordar un tema demasiado importante y que a su vez llame la atención a los fundadores de startups de la importancia de conocer más sobre los procesos de financiamiento porque en ocasiones la startup encuentra fondos, pero compromete su esencia por falta de asesoría especializada.
Aunque esta entrada esta enfocada en las Fintech, tema que abordo de forma más seguida en mi LinkedIn, es aplicable a cualquier startup.
Habrán una serie de entradas dedicadas a este tema que pronto estarán leyendo. Si necesitan hacer una consulta, abordar un caso, pedir que aborde algo sobre lo que necesitan conocer, no duden en contactarme.