Miguel Argüello Oviedo

22 de jun de 20232 min.

¿Proactivo o reactivo? Descubre la diferencia entre un gestor de riesgos legales y un abogado

Actualizado: 23 de jun de 2023

GRL vs Abogado tradicional

En ocasiones, durante nuestras reuniones con empresarios, CEOs y directores de empresas, surge la pregunta sobre el alcance de nuestros servicios en relación con los riesgos legales. A menudo se plantea la afirmación implícita de que ya cuentan con abogados internos o una firma legal externa, lo que lleva a que consideren como no necesario nuestro servicio; y ¿por qué ocurre esto?.

Es importante destacar que aunque el contar con abogados internos o una firma legal externa es valioso, nuestros servicios no son redundantes ni similares. Nos encontramos en la tarea de explicar que ambos aspectos son complementarios, pero no idénticos ni equiparables.

En este artículo voy a explicar las diferencias que existen, los enfoques que hay, la manera en que se relacionan, sus actividades principales, entre otras aristas que considero más que necesario que nuestros amigos, colegas y clientes tengan en cuenta; y conste, que tanto mi socio como yo también somos abogados.
 

Y entonces, ¿Cómo un gestor de riesgos legales marca la diferencia frente a un abogado tradicional?

Empecemos definiendo qué entendemos por riesgo legal. Sin necesidad de reinventar la rueda, nos remitiremos a la norma ISO 31022, "Gestión del Riesgo Legal", la cual es una de las bases fundamentales en nuestras consultorías. Si desean ampliar su conocimiento sobre esta norma, les recomiendo leer el artículo publicado en el Newsletter de Argüello-Romero Consulting. Pueden acceder al artículo haciendo clic en el siguiente enlace: Riesgos Legales: El Desafío que tu Empresa No Puede Ignorar

La norma ISO 31022, define riesgo legal al relacionado con asuntos legales, regulatorios, contractuales, y de derechos y obligaciones no contractuales. Les recordamos que riesgo es la incertidumbre sobre los objetivos. Así que, todo lo que genere incertidumbre sobre los objetivos de la empresa en los asuntos anteriores definitivamente deberán ser gestionados.

Vamos directo al punto. A continuación, les brindaré un cuadro comparativo sobre las diferencias fundamentales entre los abogados y un gestor de riesgos legales (GRL) en términos de enfoque, objetivos, resultados esperados y actividades principales. Estas cuatro dimensiones son, en mi opinión, suficientes para comprender las disparidades existentes.

¿Cuáles son esos aspectos diferenciadores?

Así que cuando se habla de gestión de riesgos legales en resumidas cuentas debemos estar claros que no hablamos del trabajo que el departamento legal o una firma de abogados realiza. Esto va en un sentido que colabora, claro que sí, pero además que busca como foco principal la reducción de la explosión que tu negocio, inversión, empresa o emprendimiento puede tener.

Los abogados tradicionales a veces pueden perder de vista los objetivos fundamentales de una empresa, un negocio y la esencia misma de los proyectos. En lugar de explorar nuevas corrientes y generar ideas innovadoras para encontrar soluciones a los objetivos planteados, tienden a enfocarse únicamente en cumplir con las normas y reglamentos establecidos.

Sin embargo, en la Gestión de Riesgos Legales, nuestro enfoque es proactivo y propositivo, nos comprometemos a mantenernos al tanto de las últimas corrientes y tendencias, generando ideas creativas y suficientes para abordar los desafíos planteados por nuestros clientes y ayudarles a alcanzar sus objetivos de manera efectiva.

Y si aún conservas dudas sobre las diferencias que existen te invito a ponerte en contacto conmigo para que conversemos sobre el tema al email: asesoria@arguelloromero.com